Terminadas las vacaciones es hora de volver a la cansina rutina de todos los días. Ya mismo empiezan los madrugones, los atascos, los días sin siesta, las noches cortas... en fin.

Así que, qué mejor manera de mermar la sensación de hastío que hacer un memorandum de lo que estas vacaciones han sido para Hipatia y para mí.

En realidad no es la última etapa, pero no quiero saturar el blog de post ñoños y sentimentales, así que todo en uno (v8) y arreando que es gerundio.

Todo empezó en el norte, donde Hipatia y la vaquita pararon en Huesca. Ya sabéis, podeis seguir sus aventuras al final del post, en los links de las anteriores etapas.

Poco más de una semana después continuaron más al sur y yo me uní a ellos. Nuestra primera parada: Salou (Tarragona). Un camping espectacular con tres piscinas y una playa paradisíaca, una semana de relax donde, obviamente, no podía faltar una visita a Port Aventura.

Fueron dos días de completa ebullición adrenalínica donde nos dedicamos a hacer de Güiza delante de todas las cámaras de las montañas rusas.

Totalmente recomendable el Dragon Khan, desde la primera caída no hay denscanso y sobre todo sorprende su suavidad. Nada de cabezazos ni golpes.

El Hurakan Condor, la caída libre más alta del mundo, sus 100 metros se hacen interminables de subida, pero la bajada te pega los güitos a la nuca.

Stampida, una carrera de alta velocidad entre dos vagones sobre un enjambre de madera en apariencia inestable.

Y como no, la niña bonita del parque, Furius Baco. De 0 a 135km/h en 3 segundos: ¡BUF!

Tan salvaje que acabé en la enfermería por un golpe en la pierna, lo que me dio la oportunidad de admirar cómo se lo montan allí. Un mini hospital de Adeslas, totalmente gratis y con una atención de lujo.

Nuestra siguiente parada un poco más al norte, La Ciudad Condal. Había estado ya en un par de ocasiones, pero sin la oportunidad de admirarla como ahora.

Park Güell, no mucho que añadir, otra maravilla de Gaudí. Nos encontramos una furgoneta del equipo Vodafone McLaren Mercedes y esa misma tarde nos enteramos que habíamos compartido paseo con Hamilton y su "novia" la de las Pussy Bitch Dolls. A Dios pongo por testigo de que no hubiera corrido en Valencia de haberme topado con él.

Las Ramblas y su mercado de la Boquería, el señor que vendía piruletas de escorpiones estaba de vacaciones así que me quedé con las ganas.

Sus artistas callejeros y sus quioscos de animalejos.

Desembocando en Colón, donde por un módico precio puedes subir y dominar Barcelona por un instante. Una pasada.

Nos dejamos caer por el Cosmo Caixa, un parque de la ciencia muy grande, muy bonito y extremadamente barato.


Único hervíboro con mirada frontal O_O


Y cómo no, por el barrio de Gràcia, en plenas fiestas, un espectáculo de colores e imaginación.




El penúltimo día nos pasamos por Sitges y admiramos sus Correfocs, sus castells y sus fuegos artificiales de fin de fiestas. Alucinantes.

Aunque se nos ocurrió ir con ropa de playa y acabamos con más de una quemadura, pero bue, un día es un día.

La verdad es que fue una semana bastante intensa, pero describirlo todo sería interminable.

Como madridista acérrimo no ilustraré la visita al mejor estadio de Europa ¬¬ que sí, que el Camp Nou es la hostia y qué T_T, vimos a Xavi y a Keita y a Txiki Beriguistain y curiosamente ninguno de los tres conducía un Ford Fiesta.

También visitamos el Jardín de la Ciudadela, el Arco del Triunfo, el Hard Rock Café (again, alucinante), el Barrio Gótico y su catedral, el puerto olímpico, Santa María del Mar, la kukuxumusu store, la estación de Francia...

La Sagrada Familia


Y cómo no, Montjuïc y su fuente mágica:



Tuvimos la suerte de estar allí y que nos regalara su mejor canción.

1ª estapa, 2ª etapa, 3ª etapa, 4ª etapa, 5ª etapa, 6ª etapa, 7ª etapa, 8ª estapa

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